ENSAYO: KM. 43 - LA CONCORDIA
UN CUENTO… SIN FIN…
Por. Jefferson Campos
INTRODUCCIÓN
Pelean, en algunos casos, hasta físicamente en la defensa de tesis territoriales que en la mayoría desconocen.
Muchos, aprovechándose de los beneficios, económicos, que les da una determinada provincia, apoyan a la otra.
En casos, se atreven a declarar posiciones sociales, políticas y jurisdiccionales que por absurdas, vanas y tontas, solo hacen notar que los propietarios de las mismas, únicamente buscan provechos personales, hacerse conocer y/o en algún caso buscar alguna que otra futura candidatura local o regional.
Otros, se dan golpes de pecho invocando a sus antepasados y/o ancestros, se rasgan las vestiduras proclamando la veracidad de sus tesis pero,…...lo gracioso del caso es que… SÓLO cuando se avecinan procesos electorales, los políticos locales, regionales y nacionales se mueven y se acuerdan del otrora rico, comercial y pujante recinto La Concordia.
¡Rico!.- es posible que todavía lo sea, pero… ¿para quién? ¿Acaso lo será para sus pobladores? O para los contados terratenientes foráneos que explotan nuestra tierra y todos sus recursos que una vez transformado en DÓLARES es “exportado” a otros lugares del país.
Comercial ...??? ...ahora las cosas han cambiado, no es como hace unos diez años cuando NO teníamos la carretera CALACALI – LA INDEPENDENCIA[1]; La Concordia era el paso obligado de todos los turistas que iban a las hermosas playas esmeraldeñas, activabando el comercio ya sea en restaurantes, gasolinera, almacenes, etc., etc. este dinero a su vez circulaba en los otros negocios de la población.
Ahora aquellos recursos se quedan en otro lado, dejándonos un comercio informal de todos los días en la 1ero de Mayo, decenas de enganchadores de pasajeros en el semáforo, vendedores de aguas, colas, empanadas, restaurantes nocturnos de quiosco, panes de yucas, papi pollo, carnes en palito, rellenas, etc., etc., etc., tornándose La Concordia, en un pueblo de jornaleros, empleados públicos (profesores), unos poquísimos empleados privados y la mayoría de sub-ocupados que solo estamos esperando el fin de mes, la quincena, la semana o el diario para poder comprar las cosas para la olla diaria, alguna que otra ropita y……. ¡por Dios que nadie en casa se enferme!.
Obviamente como buenos latinoamericanos y farreros dejamos un excedente para la baila y el licor. Es por eso que las únicas empresas privadas que tienen éxitos, sobre todo en la temporada seca, son las dedicadas a proveer espectáculos artísticos en la zona.
Comercial… ¡si es comercial! ¿Pero, lo será para todos?... a lo mejor para los dueños de grandes comerciales, almacenes ó… ¡ultimadamente para el TÍA!… ¿Si La Concordia es comercial?, hagan ¡POR FAVOR!, una encuesta y sabremos cuantos concordenses pueden comprar al contado… ¿COMERCIAL? Pregunten a los dueños de las tiendas de barrio cómo están sus libretas de apuntes con los FIOS a sus vecinos… ¿comercial? pregúntenles a los campesinos que dejan sus productos en las casas comerciales de la zona… ¿COMERCIAL?...que alguien diga por qué es comercial…comercial ¡SÍ! pero para muy pocos.
Pujante… ¡claro que pujante!…pero en la gran mayoría de los casos ha sido por el aporte invaluable e “individual” de hombres que en su época volcaron todos sus esfuerzos para el crecimiento de este pueblo.
A falta de ellos, La Concordia se ha estancado en todos sus ámbitos: salud, educación, desarrollo social, desarrollo económico y político.
A la falta de lideres reales de este pueblo, se suma la ignorancia ABSOLUTA (con mayúsculas) en el 99.99% de su población, sobre el origen de esta problemática, por lo cual los políticos de siempre nos manejan y mangonean a su antojadizo arbitrio, utilizando los intereses personales de personajes de nuestro recinto.
¿Alguien alguna vez preguntó?…
¿Por qué este problema?
¿Por qué razón Pichincha reclama y Esmeraldas defiende estas tierras?
¿Será acaso un capricho de políticos locos, astutos y/o desocupados?[2]
¿Este problema es reciente?
¿Cuándo comenzó? ó,
¿Realmente existe el problema?
Creo que muchos individuos se han hecho estas preguntas y lamentablemente no han logrado tener una respuesta acorde a la realidad. Pues estoy seguro que la generalidad de personas que han intentado dar respuesta a estas interrogantes lo han hecho muy parcializadas en el mejor de los casos, y disparatadas en otros.
Al ser descendiente de unas de las primeras familias que se asentó por estas tierras que hoy se llaman La Concordia, me he visto en la necesidad ineludible de entregar al concordense una reflexión seria, fresca y real del pasado de su suelo. Para que tengamos un instrumento eficaz de comprensión de las raíces históricas regionales y de esta forma permitir que sobre un análisis de los tiempos pasados encontrar las respuestas a uno de nuestros grandes problemas, que nos lacera, vulnera y quebranta, como es la falta de identidad, fomentada, entre tantas, por la indefinición jurisdiccional.
Este ensayo es una gran parte de lo que plasmaré en el vídeo aficionado, que al momento estoy realizando sobre el mismo tema, pero en vista de los acontecimientos que se ven venir, por el año electoral, creo que es necesario entregar al concordense, este ensayo, para que de una vez por todas nos dejemos de necedades y trabajemos con un mismo norte para poder tomar la solución más lógica y apegada a la verdad.
Desistiendo de la historia de llegada de los primeros hombres que poblaron lo que hoy se llama América, iniciaremos con:
ETAPA PRE INCA
En la "Relación de la provincia de las Esmeraldas" (Jiménez de la Espada 1965: III, 87 y sig.), redactada al final de la expedición emprendida en 1569 por Andrés Contero, desde Passo hacia Coaque y probablemente hasta la región de Cojimíes, se menciona la existencia de un pueblo grande llamado Císcala, que gozaba de paz y era seguro para todas las provincias circundantes.
Su condición de pacífico enclave y la fama por las actividades mercantiles que en él tenían lugar, atraían a los mercaderes de su extenso ámbito entre Passo, y el río San Juan. De este modo, los Tacamez vendían en Císcala oro y Esmeraldas, los Campeces y Pidres llevaban sal y pescado y los Beliquiamas intercambiaban ropa y algodón, con otros productos.
Los Tacamez procedían seguramente de la región de Atacames, los Campeces quizás de la comarca de Campaz, distante de San Mateo 15 lenguas, mientras que los Beliquiamas, la falta de indicios imposibilita todavía su identificación (Hartamann 1971: 217-218; Rumazó 1949: IV, 33).
El centro de intercambio Císcala quizás corresponde, según algunos autores, al asentamiento arqueológico de La Tolita, opinión que no puede ser hasta el momento verificada. Es importante, sin embargo, poner de relieve la existencia de una red comercial, mediante la cual varias provincias ricas, bajo el mando de caciques poderosos y belicosos, garantizaba una convivencia en paz (Holm y Crespo 1981: II, 16)
Esa fue la condición de los naturales primigenios de la provincia de Esmeraldas, no como algunos historiadores quieren hacer ver al referirse a nuestras tierras como salvajes e insalubres tanto así, que ni siquiera el Inca quiso incorporarlas a sus tierras.
Esta falsedad es tirada al suelo por la sencilla razón de que el Inca aprovechó de los recursos naturales de estas tierras, pues tenía una ruta hasta un embarcadero en la desembocadura del Río Silanchi donde los emisarios del Inca se proveían de los frutos necesarios para llevarlos a su señor.
En todo caso es comprensible el poco interés que tuvo el Inca por estas tierras debido sobretodo a que su clase, su gente, estaba acostumbrada a otro tipo de clima, un clima de la serranía más benigno a sus costumbres.
Por otro lado los incas no vinieron a estas tierras (las del actual Ecuador) sólo como conquistadores sino con un objetivo fijo y religioso, que fue la búsqueda del único sitio donde el sol era visible en los equinoccios sin dejar sombra.
Este sitio se encuentra en el Monte Catequilla, en el cual aproximadamente 900 años antes de la llegada de los españoles e incluso antes de la invasión inca, los aborígenes ecuatorianos ya identificaron el paralelo 0º 0´ 0´´, es decir la mitad del mundo. Pero eso… es otra historia.
Hasta aquí amigo lector creerá que me estoy refiriendo exclusivamente a los pueblos costeros, los cuales nada tienen que ver con las actuales tierras de La Concordia; se equivoca, ya que los habitantes de lo que hoy es América del Sur estaban unidos por vías de intercambio que permitían el transito de personas, productos e información.
Si es eso no fuese cierto ¿Cómo los españoles se enteraron con noticias exactas del imperio situado mucho mas allá de la línea ecuatorial? ¿Cómo sabían la existencia del imperio de los incas?
Estas vías de integración no sólo eran marítimas, sino que también fluviales[3] y por supuesto terrestres, a través de senderos.
Sin embargo, fueron al último, esta alta calidad de integración la que sirvió irónicamente a los propósitos de un destino adverso. Pues, por estas mismas redes de comunicación circularon las mortales enfermedades “europeas” las que atacaron a nuestros naturales los cuales no tenían defensas biológicas y que diezmaron y acometieron mucho antes de que los portadores de las mismas penetraran en sus tierras.
El mismo Inca Huayna Capac murió entre 1525 y 1527 en Quito probablemente por viruela o sarampión, ignorando que su mal emanaba de los posteriores masacradores de su imperio.
Entonces es lógico suponer que por estos territorios por los cuales ahora vivimos, si bien cierto eran una gran selva, también es cierto que por ella debieron de circular por sus senderos, ríos y riachuelos, exploradores de nuestras poblaciones nativas, cazando, recolectando frutos, buscando plantas, etc., etc.
¿Cuáles serian estos exploradores?
Lo más razonable es que tendrían que ser los habitantes de los pueblos costeros, pues para los oriundos de la serranía hubiera sido muy difícil soportar los rigores de nuestra selva.
Concordenses, el Ecuador tal como lo conocemos y entendemos hoy, en sus inicios no era así, ni siquiera el mítico Reino de Quito, del Padre Juan de Velasco, existió como él lo describió.
El Ecuador preinca estaba conformado por grupos tribales con sistemas de organización política como los curacazgos o cacicazgos, con autonomía política y económica, los cuales, sí, tuvieron una gran capacidad de organización, haciendo creer a los primeros historiadores-investigadores de que se trataban de primitivas formas de estados. Esos cacicazgos eran los que existían y eventualmente, aunque no existen pruebas contundentes sobre ello, se unían con otros para dar soluciones a diferentes problemas, pero cada cual seguía siendo soberano, es decir juntos pero no revueltos.
“En estos tiempos la investigación de la historia nos permite establecer que un REINO, como lo narra el Padre Juan de Velasco no pudo existir. Los señoríos étnicos del norte andino fueron muy importantes y se aliaron para resistir la invasión inca, pero fueron distintos al ESTADO que Velasco describe y sus centros urbanos no estaban en Quito. No hay ninguna base para pensar como históricos a los scyris o la dinastía Duchicela. Aún más, aunque hubiera existido, esa no puede ser considerada como base de la "nación quiteña" y de la nacionalidad ecuatoriana. El Reino de Quito, según el propio Velasco, abarcó la sierra centro norte. No incluyó en realidad ni a los cañaris ni a los pueblos de la costa, que tuvieron su identidad propia.
El Ecuador como Estado Nación es más que Quito y su espacio de influencia, ya que está integrado también por otros espacios regionales que tiene su propia historia. Y en cuanto a la versión concreta sobre la naturaleza del Reino de Quito, sus gobernantes y sus guerras, que el P. Velasco narra con tanto entusiasmo, tenemos que valorizarla por la calidad literaria y su contenido mitológico. Allí hay hermosas narraciones que deben ser leídas como leyendas que alimentan el imaginario nacional.
Como la leyenda de Rómulo y Remo para los romanos, como la del Rey Arturo para los ingleses, no se valoran por su precisión histórica, sino porque contiene un mensaje de identidad. La Historia de Juan de Velasco es una de las obras claves del Ecuador, no solo porque fue el primer intento de historiar su pasado, sino también porque con ello puso una de las bases de nuestra identidad como estado nación”[4]
Ni los incas con todo su poderío político, económico y militar, pudieron enseñorearse sobre todos los cacicazgos que existían en el Ecuador antiguo. Los españoles sí, pero porque llegaron en una etapa crucial por la que atravesaba el imperio inca, no se olviden que recién se había dado lugar a una lucha fraticida entre los dos hermanos incas Huáscar y Atahualpa. Por su lado Atahualpa no había podido consolidar su autoridad y adhesión de todos su súbditos, como ya se dijo anteriormente, en todas las confederaciones étnicas que existían.
Tal situación fue la que aprovecharon los españoles al aliarse con cacicazgos que estaban en contra del invasor inca, para poder derrotarlo. Esta derrota, la de Atahualpa, a criterio personal, pudo haber sido causada en parte, por el alto nivel de egocentrismo que debió de tener el inca al creerse invencible, al ser considerado un semi dios hijo del sol y de la luna; solo así se explica su presencia con hombres totalmente desarmados encerrado en una plaza en Cajamarca.
ETAPA DE LOS CONQUISTADORES
Es indiscutible que los primeros españoles en llegar a estas tierras bendecidas por Dios, que hoy se llaman República del Ecuador, lo hicieron en la actual provincia de Esmeraldas. Justamente Bartolomé Ruiz, “veterano de la conquista americana” enviado como explorador por Francisco Pizarro en busca del ansiado y misterioso reino del PERÚ[5], se topa en el año de 1526 (después de dejar a Francisco Pizarro en la isla del Gallo), con una hermosa bahía de verde azulado con inmensos árboles y un ancho y navegable río que desembocaba al océano. Se introduce como es natural por este río y echa anclas, sin desembarcar, según ciertos autores frente a un poblado que más tarde llamaría San Mateo.
En esta parte existen contradicciones entre los historiadores, unos dicen que desembarcó y otros que no, pues su misión solo era la de observación, pero en todo caso los mismos afirman que los naturales de ese lugar se mostraron amistosos.
Y, es sólo en el segundo viaje en el que en compañía de Francisco Pizarro el 21 de septiembre de 1526, desembarcaron y denominan a esos lugares como San Mateo.
Según el Historiador González Suárez en esta segunda llegada en la cual desembarcaron, los nativos no fueron ya tan amistosos lo cual obligó a los españoles reembarcar y seguir hacia el sur. En ese trayecto se toparon con Tacamez[6](Atacames), Jama, Portoviejo, Isla Puná y Túmbez; y entre escaramuzas, asaltos y también encuentros pacíficos confirmaron la existencia del gran imperio del Sur.
Como este ensayo se refiere a problemas de límites hay algo en esta etapa de la conquista que es válido señalar: Francisco Pizarro y Diego de Almagro tuvieron siempre diferencias más que todo por situaciones de repartimiento de “oro”[7] y “tierras”, esto comienza desde antes de que se asocien para organizar la conquista del Perú.
Pero el categórico motivo para sus peleas surgió AL NO EXISTIR LÍMITES PRECISOS para sus respectivas gobernaciones. De tal manera que cada quién se sentía en el derecho de incorporar las tierras del Cuzco a sus respectivos feudos. Al final Almagro es ejecutado por las fuerzas de Pizarro y a su vez los Pizarro, son ejecutados, por fuerzas Almagristas; las primera luchas fraticidas en lo que sería “América del Sur”, todo por límites.
ETAPA COLONIAL
En la época de la conquista realmente nada tuvieron que hacer los conquistadores en estas tierras costeras (las de Esmeraldas). Más bien ya asentada la Colonia y habiéndose intensificado un gran intercambio comercial con España a través de Panamá, unificada a la codicia por el oro y las míticas gemas verdes, surgió la necesidad política y económica de construir un camino directo desde Quito hacia el Océano.
Algunas fueron las expediciones a los territorios de Esmeraldas y si se considera el año de 1526, el de arribo de los españoles, a Esmeraldas, hasta 1600 en que los evangelizadores mercedarios llevan a Quito al mismísimo Sebastián de Illescas (Sebastián hijo), son 74 años de duros y cruentos enfrentamientos y en los cuales llevaron la peor parte los españoles.
Fue un sinnúmero de expediciones que tuvieron que darse para tratar de pacificar esos territorios los cuales ni los Quitus ni los Incas lograron realizar. En todo caso 1600 no significa el fin de las agresiones estas siguieron por muchos años más.
Finalmente, en 1611, el Corregidor de Otavalo Capitán Pablo Durango de Delgadillo finalizó un camino que unía Quito con Esmeraldas; cosa curiosa, el Virrey del Perú Príncipe de Esquillache prohibió la utilización y conservación del mismo, argumentando que esa obra era una invitación a que los corsarios penetren hacia Quito y lo saquearan. Además utilizo el pretexto de los altos costos de mantenimiento del mismo; pero la cuestión real era la oposición de los comerciantes guayaquileños que veían en una salida al mar por Esmeraldas, algo totalmente contraria a sus propios intereses comerciales.
En 1622 el mismo Pablo Durango, después en 1626 Pérez Mancheno y Vinicio Genovez en 1635, siguen en la misma tarea pero sin lograr el objetivo, esta vez por oposición de los oriundos.
Sin querer alargar la parte de la historia colonial creo que es necesario transcribir el informe que Juan Pío Montúfar y Crasso, Marqués de Selva Alegre y Presidente de la Real Audiencia de Quito elevara al Rey de España, en agosto de 1754. “Especialmente en lo que concierne a los límites y extensión de los territorios de la Provincia de Esmeraldas.”
(Tomado textualmente del libro Historia de Esmeraldas Julio Estupiñán Tello págs. 82-83-84)
“El gobierno de la provincia de Esmeraldas se halla entre las dos jurisdicciones de Barbacoas y Guayaquil en la costa del mar del sur. Tiene este gobierno mas de 56 leguas de longitud desde Usual, que es la línea divisoria, que lo separa de la jurisdicción de Popayán hasta la Sierra nombrada de Bálsamo que por la parte del sur hace división de aquella con el distrito de Guayaquil. La provincia de Esmeraldas ha estado desde la antigüedad, inculta o por el esmero que se llevaron otras o por ignorarse de la fertilidad y hermosura de aquel país; a él se nominaron distintos gobernadores y como el destino era empresa que se dirigía a una conquista, anduvo menos despierta la resolución hasta que la de Don Pedro Maldonado Sotomayor gentil hombre de Cámara de su majestad y barón de elevado espíritu y esclarecida conducta; quien confirió este gobierno en soberano por el tiempo que durase su vida y la de su hijo con la asignación de 2600 ducados de renta anual, la emprendió zanjando camino desde esta ciudad(Quito) a aquella provincia que estableció hasta los términos hacer ver la preciosidad que ella contiene y hubiere sin duda llevado a mayor aumento, si el fin de su estimable vida no se hubiese opuesto a los progresos de la conquista.
Es aquella provincia un territorio muy fértil y abundante de todo género de frutos muy semejante en ello a los que se cosechan en Guayaquil. Contiene en aquella jurisdicción tres puertos de mar y la ciudad de Limones erigida por el citado Pedro Vicente Maldonado, veintiún poblaciones de esta manera: los puertos de Tumaco, Tola, San Mateo de Esmeraldas, Atacames, La Canoa y los pueblos de Lacha, Cayapas, Inta, Gualea, Nanegal, Tambillo, Nigua, Mindo, Lambe, Cocaniguas, Cansacotog, Santo Domingo, San Miguel y Nono. En toda esa jurisdicción habitan indios, negros y poco número de españoles.
Los más apreciables frutos consiste en la cera, copal, bálsamo, brea, pita, vainilla, achiote, zarza, la hierba de la que se labra el añil y tabaco. En sus montañas se tiene cacao muy sobresaliente y de calidad muy superior al de Guayaquil. Hay las mismas maderas que en aquellos montes y por no frecuentados los de Esmeraldas, más hermosas y abundantes hasta poderse destinar a la construcción de las mayores Naos.
Circundan aquella jurisdicción dos célebres ríos, el Santiago y el Mira, ellos son navegables, y en sus orillas y esteros se lavan las arenas, extrayendo de ellas crecidas porciones de oro con las corrientes que arrastran las poderosas minas de este metal que hay en aquel territorio, ellas han sido trabajadas con mucha utilidad; y se han conocido que hacen ventajas con las de las provincia de Barbacoas porque sus proporciones forman la comodidad de poderse trabajar todas con aguas vivas y las de tenerse en los muchos ganados que contiene aquel distrito facilidad para el mantenimiento de la gente que se destinase a las labores.
Es constante que aquella provincia tiene minas de Esmeraldas que son testimonio irrefragable las que de allí sacó Don pedro Maldonado. La muerte de este ha privado a la Monarquía de la utilidad que su celo hubiere establecido en aquellos dominios; estos están hoy en la mayor decadencia porque podría promoverle aumento del alma de comercio que no se practica desde la falta del citado Gobernador, hallándose aún la senda que franqueo desde esta ciudad (Quito) hasta aquella provincia casi impracticable; de modo que solo existen la que para camino de a pie hizo de la villa de Ibarra siendo corregidor el general Don Manuel Díaz de la Peña.
No pude llegar a esta provincia a todos medios que esta es capaz mientras no se arbitraran medios de su fomento.
La Merced que su Majestad hizo de este gobierno al hijo de Don Pedro Maldonado, por su fallecimiento no se ha verificado, por haber quedado sucesión solo en línea de hembra, cuyo derecho en fuerza de matrimonio contraído deduce ante la real persona Don Manuel Díaz de la Peña en quien hay aptitud para desempeñar este y otros cargos.
Gobiérnase hoy aquella provincia por un Teniente que designa el Gobierno de esta Real Audiencia, el no goza de salario alguno y solo puede subsistir hallándose avecindado en la jurisdicción. He dado razón a vuestra excelencia de lo que en la mía se incluye con respecto a los artículos que me manda V.E. me responda a quien me basta informar acerca de esta capital y a la provincia de Guayaquil…
Nuestro señor guarde a V.E. por muchos años, Quito y Agosto de 1754”
No hay que olvidar que los territorios de Esmeraldas, fueron dados en calidad de propiedad privada durante dos vidas a Don Pedro Vicente Maldonado, el cual como todo dueño de su terruño, los recorrió de cabo a rabo, colocando e identificando, como debe ser, sus límites. Este trabajo realizado por Pedro Vicente Maldonado fue de gran precisión, considerando la época, razón por la cual los tomo como base el sabio Teodoro Wolf, en su posterior carta geográfica.
Originariamente, lo que hoy es la República del Ecuador y otras tierras más, era una Gobernación dependiente del Virreinato de Lima, estaba constituido por las tres ciudades que en ese entonces se habían fundado: Quito, Guayaquil y Portoviejo, cada una con amplios territorios aledaños obviamente la atención se centraba en la primera de ellas. Posteriormente se fundó Loja en 1546 – 1548, Zaruma y Zamora en 1550, Baeza y Cuenca en 1557.
En 1563 el Rey Felipe II eleva a esta Gobernación a la condición de Real Audiencia pero dentro de la jurisdicción del Virreinato del Lima (Perú). A esta Real Audiencia de Quito se le reconocían los territorios de Quito, Guayaquil, Portoviejo, Cuenca, Loja, los pueblos de Latacunga, Ambato, Chimbo, Baeza, Sevilla del Oro, Logroño, Zamora, Valladolid, Jaén de Bracamoros.
Sus límites eran: Al norte con Buenaventura, incluyendo Pasto, Popayán, Buga y Cali. Por el sur limitaba con Paita, por el oriente llegaba hasta el río de las Amazonas.
Pero que tienen que ver esto con La Concordia?…se preguntarán ustedes… Mucho ya que quiero que conozcan cuales eran los primeros territorios con los que contaba el “Ecuador” al inicio, en la vida colonial, y como poco a poco se nos fueron quitando los mismos.
Comenzamos con manipulación:
Ø 1718, mediante Cédula Real se suprime la Real Audiencia de Quito y se incorpora con todos sus territorios al Virreinato de Santa Fe de Bogotá.
Ø 1722, Se restablece la Real Audiencia y nuevamente pasamos a depender del Virreinato de Lima, se supone con los territorios intactos.
Ø 1739 Felipe IV que había sustituido a Carlos II, pasamos otra vez a formar parte del Virreinato de Santa Fe de Bogotá y ahí quedamos hasta las guerras de independencia
ETAPA DE LA GRAN COLOMBIA
En la fugaz época o “aventura” de La Gran Colombia[8], nos dejó como resultado la ruptura de los estados que la conformaron y tramposamente, a nosotros, nos toco la peor parte, primero recortes territoriales y luego el pago de la mayor deuda económica dejada por las guerras de la liberación.
Hablemos de la parte territorial:
La Gran Colombia estaba dividida en tres grandes distritos, supuestamente para una mejor administración.
La anterior Capitanía General de Venezuela era el Distrito del Norte dividido en sus respectivos departamentos.
El Nuevo Reino de Granada era el Distrito Central compuesto por sus departamentos. Y,
El Distrito del Sur conformado por los departamentos de Ecuador capital Quito, Azuay con su capital Cuenca y Guayaquil con su capital Guayaquil, perdiendo en ese instante los pueblos, que le pertenecían como Real Audiencia, me refiero a Buenaventura, Pasto, Cali, Buga y Popayán, los cuales fueron incorporados al Distrito Central (Nuevo Reino de Granada) con los cuales se formaría después la República de Colombia.
Da la impresión que los personajes de esa época, los caudillos militares, los congresistas, no estaban preparados para la administración jurisdiccional de los territorios de ese gran país, pues se dictaban leyes y decretos que por su generalidad, daba lugar a cualquier interpretación y es ahí donde comienzan, los males territoriales nacionales, provinciales y regionales.
EL 25 DE JULIO DE 1824 LEY DE DIVISIÓN TERRITORIAL DADA POR EL CONGRESO DE COLOMBIA (PARTE PERTINENTE A ESMERALDAS)
El Gobierno de Colombia promulga el 25 de Julio de 1824 la Ley de División Territorial de la República, aprobada por el Congreso Nacional, en el cual se establece definitivamente el número de sus departamentos, considerándose entre estos los DEPARTAMENTOS DE ECUADOR CON SU CAPITAL QUITO, AZUAY CON SU CAPITAL CUENCA, GUAYAQUIL CON SU CAPITAL GUAYAQUIL, conforme los siguientes artículos
Aquí y de un solo plumazo nos quitan los territorios de Buenaventura, Pasto, Cali, Buga y Popayán.
…Art. II.- El departamento del Ecuador comprende las provincias de, 1º de Pichincha con su capital Quito; 2º de Imbabura con su capital Ibarra; 3º de Chimborazo con su capital Riobamba.
1.- Los cantones de la provincia de Pichincha y sus cabeceras son: 1º Quito; 2º Machachi; 3º Quijos; 4º Esmeraldas;…
Adviértase el retroceso que otorgan a Esmeraldas, en la época Colonial (que no era la mejor) Esmeraldas era considerada como provincia (con gobernador incluido) y ahora con esta Ley se la considera sólo Cantón.
“¡COSAS DE LA GRAN COLOMBIA!”
…Art. 20.- Al Departamento del Ecuador corresponden en el interior los límites que lo dividen de los de Azuay y Guayaquil, y en la parte litoral desde el puerto de Atacames, cerca de la desembocadura del río Esmeraldas hasta la Boca del Ancón, límite meridional de la provincia de Buenaventura.
Art. 21.- La Nueva provincia de Manabí del Departamento de Guayaquil, ocupa la parte de territorio de Esmeraldas, que por la Costa se extiende desde el río Colonche hasta Atacames, inclusive en el interior tendrá por límites los que han separado la provincia de Quito de esta parte de Esmeraldas”….
Por el reclamo que hizo el Departamento de Ecuador en la parte en cuestión, el Congreso Nacional de Colombia expidió una nueva Ley el 18 de abril de 1826 – un año y un poco más de nueve meses después- en la que en su parte pertinente dice “El cantón litoral de Esmeraldas de la provincia de Pichincha en el Departamento del Ecuador, tendrá por término respecto a la provincia de Manabí en la Costa del Pacífico el río Muisne, continuará la Boca del Ancón en río Mira por límite Litoral.
Art. 10.- La ley del 23 de Junio de 1824 año 14, sobre división territorial queda revocada, en la parte que se contraria a la presente adicional a la misma ley.
Dado en Bogotá, a 17 de abril de 1826-etc. Palacio de Gobierno en Bogotá, a 18 de abril de 1825/16.- ejecútese….etc.
Nota.- De Julio Estupiñán Tello Libro RECOPILACIÓN DE LEYES, DECRETOS Y ORDENANZAS SOBRE DIVISIÓN POLÍTICA DE ESMERALDAS.- “Solamente en virtud de esta Ley adicional a la de 1824, el Cantón Esmeraldas, fija sus límites en el territorio litoral dentro de la costa comprendida entre Muisne al sur y Mira al norte, o sea lo que hoy comprende la provincia de Esmeraldas más la extensión hasta Cojimíes, según convenio entre las dos provincias en 1927.
Además con esta Ley de 1826 se extiende el territorio de Esmeraldas, por el sur, que en la Ley de 1824 se lo había recortado hasta Muisne. Y por el lado Norte desde Ancón se lo extiende a Mira.
En 1927 los cantones de Esmeraldas y Sucre firman un acuerdo señalando los límites entre los dos cantones el río Cojimíes.
Lo destacado es que Pichincha y Esmeraldas formaban parte del mismo departamento, Esmeraldas era cantón de Pichincha por lo que hubiera sido fácil, definir los límites cantonales de su propio departamento, pero no le dieron importancia.
Lo primordial, es que las provincias de Pichincha y Esmeraldas nacieron en una misma matriz en un mismo departamento, hermanas de padre y madre.
Esmeraldas fue, es y será de vital importancia para Quito, diferente hubiera sido el país si las personas de ese tiempo hubieran puestos sus esfuerzos en la construcción de un poderoso puerto por el cual se hubiere comerciado más rápidamente con el resto del mundo.
En la época republicana las cosas en vez de mejorar, empeoraron a la hora de fijar límites jurisdiccionales.
Pero primero repasemos algo de cómo fue esta nueva aventura del inicial Grupo de Confederaciones preincaicas después Gobernación del Virreinato de Lima o Real Audiencia de Quito agregada al Virreinato del Perú a continuación Real Audiencia de Quito anexa al Virreinato de Bogotá, y finalmente Distrito del Sur de la República de Colombia (Gran Colombia) .
DISOLUCIÓN DE LA GRAN COLOMBIA
A partir de 1826, adviértase que antes de la guerra con el Perú, Simón Bolívar ya vaticinaba que el clima de rivalidades, intrigas, ambición de los Jefes militares y otros (la naciente plutocracia) llevaban a una disolución de la Gran Colombia. Los pedidos y afanes por diluir la Gran Colombia, para constituir los pueblos independientes en base a las antiguas circunscripciones coloniales, eran impetuosos
Ese pedido de antiguas circunscripciones coloniales, no fueron más que demagógicos pues al disolverse la Gran Colombia, parecería como que “aquí no pasa nada y cada quien para su casa” pues Venezuela vuelve a ser lo que era antes con los territorios intactos de su Capitanía. Nueva Granada con sus territorios del Reino de la Nueva Granada más los pueblos y territorios que le cercenaron a los “patriotas independistas”, los cuales asombrosamente estaban ocupados realmente en otras cosas matándose entre ellos o desgastándose en intrigas palaciegas.
En 1830 se reunió un congreso constituyente tratando de contrarrestar el separatismo pero…fue inútil.
Cosa curiosa la Antigua Capitanía General de Venezuela es la primera en separarse de la Gran Colombia y declarar fuera de Ley y desterrar a un hijo suyo como fue Simón Bolívar. -Nadie es profeta en su propia tierra.-
Otra cosa extraña, la madrugada del 4 de junio del mismo año (1830) cuando Antonio José de Sucre, indiscutible sucesor de Bolívar, regresaba a Quito, es asesinado en las montañas de Berruecos por ¡dos comandantes, dos capitanes y dos soldados del ejército libertador! – principales sospechosos del asesinato Gral. Obando (Colombiano de nacimiento) y Gral. Juan José Flores (venezolano) que se habían radicado en tierras de lo que sería el futuro Ecuador. – Pero de que nos admiramos no fueron los ¡judíos quienes mataron a otro judío JESÚS DE NAZARETH!. - Cosas irracionales de un animal supuestamente racional como el ser humano.
ETAPA REPUBLICANA
El 13 de mayo de 1830 una vez que se había retirado del gobierno Simón Bolívar se reúne en Quito una junta de “notables” y proclamó la separación del Distrito del Sur de la Gran Colombia, constituyéndose en un estado libre e independiente, con sus pueblos y los que más que quieran unirse, mediante las relaciones de naturaleza y reciproca conveniencia, al mismo tiempo que pregonaba que formaría un gobierno acorde a sus costumbres, circunstancias y necesidades –¡Pusieron a un venezolano como presidente!- . Posteriormente se unieron Guayaquil y Cuenca, y se llamó a una constituyente que el 23 de septiembre de 1830 proclamaba que el nombre del nuevo estado sería el de Ecuador.
Se lo bautizó así en un intento de superar las diferencias regionales, puesto que el nombre de Quito despertaba resistencias en los departamentos de Guayaquil y Azuay e hipócritamente y tardíamente proclamaban a Simón Bolívar como padre de la patria y protector del sur de Colombia – ¡¡de que sur de Colombia si ya no existía!! - invitándole a vivir en nuestro país. -Que iba a venir al Ecuador si el Presidente de la naciente república era sospechoso de conspiración para el asesinato de Antonio José de Sucre.
Después de que se fundó la República en 1830, recién en la segunda administración de Juan José Flores entre 1839- 1842 asoma una pequeña preocupación por la reapertura del camino a Esmeraldas, pero más por afán de los Ibarreños que por interés gubernamental. No se olviden que todo el comercio estaba monopolizado por el puerto de Guayaquil. –Igual que en el tiempo de la colonia el poder económico es el que manda - se me antoja una pregunta ¿existiría el hombre del maletín en esa época?.
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Vicente Rocafuerte[9] llevo su acción civilizadora por casi todo el país y digo casi porque por Esmeraldas – ¡nones!-
Más bien por la altísima sabiduría de los padres de la patria – siempre fueron igual – el 13 de abril de 1839 el senado y cámara de representantes de la República del Ecuador, reunido en congreso decretan. Art. 1º Se agrega el cantón de Esmeraldas a la provincia de Imbabura. Dado en Quito 1º de abril de 1839.- Palacio de Gobierno en Quito el 13 de abril de 1839.- Ejecútese.- P.S.E. El Ministro de Hacienda Encargado del despacho del interior, Luis Saa.- Así de simple y san se acabó.
Y como Juan José Flores no tenía nada que hacer, porque parece que nadie protesto y si protestaron no los escucharon por lo menos durante cuatro años.
DECRETA:
Juan José Flores, Presidente de la República del Ecuador. Hacemos saber a todos los ecuatorianos, que la Convención Nacional ha decretado, y nos hemos sancionado lo siguiente:
REPÚBLICA DEL ECUADOR
Presidente de la Convención Nacional.- Quito a 31 de Mayo de 1843.
Exmo. Sr. La Convención Nacional ha resuelto que el Cantón Esmeraldas pertenezca en lo sucesivo a la provincia de Quito, y no a la de Imbabura, como lo disponía el Art. 1º.- de la Ley del 13 de abril de 1839 que queda derogado, y me encarga lo ponga en conocimiento de V.E., para que esta deliberación tenga su efecto. Dígnese vuestra excelencia aceptar la consideración y respeto con que me suscribo de V.E. obsecuentemente servidor.- José Félix Valdivieso.- Al Exmo. Presidente de la República.
Palacio de Gobierno, en Quito a 3 de junio de 1843.- Ejecútese.- Juan José Flores.- Por V.E. Juan Hipólito Soulin.
Por tanto mandamos a todas las autoridades de la República la cumplan y la hagan cumplir.-Firmado por Juan José Flores.- Por S.E.. - Juan Hipólito Soulin.
¡Y no ha pasado nada! ¡Todo vuelve a la normalidad! un decreto más un decreto menos, que importa los que viven en esos lugares. Y no crean que esto sólo sucedía con Esmeraldas.
Si embargo la vida por estas tierras transcurrían con la normalidad de la selva sin apoyo gubernamental sin caminos por donde circular, más bien por antiguos senderos y ríos por donde lo habían hecho por centurias los naturales; alguna que otra trifulca, un muerto más un muerto menos, viviendo a la buena de Dios.
Inclusive los decretos tomados por los padres de la patria en algunos casos ni siquiera se cumplían, peor ejecutarse. Decretos van, decretos vienen, ¡viva la vida!
En 1847 se crea la Provincia de Esmeraldas con independencia política pero COSA CHOCANTE para elecciones de Representantes y Senadores formará un solo distrito con la provincia de Pichincha y los electores tendrán que votar en Quito. –perlas de los políticos de siempre- lo más chistoso es que este decreto no se promulgó por los canales de la Ley por lo que quedó en nada. Permaneciendo vigente la misma Ley de División territorial promulgada en la Gran Colombia –¿?¿?¿?¿?-
Lo interesante de este decreto que nunca logro legalizarse y aplicarse es que a pesar de crear una provincia, desmembrando terrenos de otra como en este caso Pichincha, jamás se preocuparon nuestros adorados e inteligentísimos padres de la patria consignar límites, esto es algo repetitivo en los decretos de creación de provincias y otras.
Y, en el caso que señalaban límites lo hacían a la ligera como en el caso de la LEY TERRITORIAL DEL 29 DE MAYO DE 1861[10] en el que por primera vez se da a Esmeraldas el trato y rango de provincia, se dice su cantón y sus parroquias pero de límites con la provincia, de donde se supone se desmiembra, ¡NADA!.
Realmente la vaguedad e imprecisión en lo que respecta a límites es asombrosa.
LEY DE RÉGIMEN ADMINISTRATIVO DE 1869 (GOBIERNO GABRIEL GARCÍA MORENO).
“La provincia de Esmeraldas se compone de solo el cantón de Esmeraldas, QUE CONSTA DE LAS PARROQUIAS DE Esmeraldas, Atacames, San Francisco, Concepción, Pailón y San Lorenzo, con sus comisarías y territorios al norte que comprendían la Antigua Presidencia de Quito.”
Parroquia de Pailón nunca existió ni existe en Esmeraldas, es posible que se cometiera un error de trascripción y lo que realmente quisieron decir era Pailón de San Lorenzo.
Además era necesario ser más precisos, no nos olvidemos que algunos antiguos territorios al norte de la Antigua Presidencia de Quito eran ya de La República de Colombia.
Refirámonos al mapa, nótese hasta donde llegaba la Antigua Presidencia de Quito (Buenaventura, Cali, Pasto, etc.)
Cosa igual sucede en las LEYES DE DIVISIÓN TERRITORIAL DEL ECUADOR DEL 4 DE JUNIO DE 1878, 23 DE ABRIL DE 1884 Y 14 DE ABRIL DE 1878, en la primera dice así en la parte pertinente:
“Art.12.- La provincia de Esmeraldas se compone del cantón Esmeraldas, que consta de las parroquias de Esmeraldas, Atacames, Rioverde, La Tolita, San Francisco, Concepción, San Lorenzo, Muisne, Cayapas, San Mateo, Y LOS DEMÁS TERRITORIO COMPRENDIDOS POR ESTE LADO EN LA ANTIGUA AUDIENCIA DE QUITO.
En la segunda L.T[11]., en la parte pertinente:
“Art. 12.-La provincia de Esmeraldas se compone del cantón Esmeraldas, y este de las parroquias de Esmeraldas, Atacames, San Francisco, Muisne, Rioverde, La Tola, Concepción, San Lorenzo, San Mateo y los demás territorios de la costa occidental pertenecientes a la antigua Presidencia de Quito
En la tercera L.T. en la parte pertinente:
“Art.16.- La provincia de Esmeraldas se compone del Cantón Esmeraldas, y este de las parroquias de Esmeraldas, San Mateo, Atacames, San Francisco, Muisne, Río Verde, La Tola, Concepción y San Lorenzo y los demás territorios de la costa occidental, pertenecientes a la antigua Presidencia de Quito.
Quitándoles la culpa a los padres de la patria y suponiendo, que no se dan límites en los decretos de creación de provincias por el simple hecho de que ya los conocían o de que se debían mantener los límites de las parroquias que conformaban los cantones; pero ¿dónde están esos acuerdos de los concejos cantonales?
Más bien parece que los padres de la patria estaban esperando que los límites los pongan los mismos habitantes, ya sea por título del primer ocupante, o porque ellos conocían que por prescripción todo eso ya tenía dueño o por meramente la más elemental topografía[12] o sea atentos a sus costumbres o cambios climáticos tan marcados en nuestro país, cosa que realmente sucedió de esa u otras maneras ,porque si no hubiese existido la desatinada creación de la Parroquia “Río Blanco” en l947 no se hubieran suscitado reclamos jurisdiccionales por parte de colonos Pichinchanos para comenzar con este lío.
En esas épocas (los políticos) actuaban así por que en su mayoría eran personajes de la alta sociedad que desconocían el verdadero Ecuador - igual que ahora-, eran señores que jamás osarían ensuciarse las botas o internarse por los rincones del Ecuador.
Por ejemplo desde 1830 en adelante para ser considerado ciudadano y estar en goce de sus derechos se debía ser casado o mayor de 22 años, tener una propiedad raíz, valor libre de 300 pesos o ejercer alguna profesión o industria útil sin sujeción a otro, como sirviente domestico o jornalero, saber leer y escribir,…
Pero eso no significaba que podía ser elector, pues para tal, además, tenía que ser sufragante parroquial, haber cumplido 25 años, ser vecino de unas de las parroquias del cantón y gozar de una renta anual que provenga de bienes raíces o del ejercicio de una profesión o industria útil.
En cuanto para ser diputado a más de las otras, tener una propiedad raíz, valor libre de 4000 pesos o una renta de 500, como producto de una profesión científica o de una empresa particular.
Para ser presidente de la República ser ecuatoriano por nacimiento o colombiano en estado actual de servicio al Ecuador al tiempo de declararse estado independiente y que estén casados con una ecuatoriana de nacimiento y que tengan una propiedad raíz de treinta mil pesos (dedicada a Juan José Flores)
Las condiciones económicas para ser ciudadano desaparecen en 1861 subsistiendo las de senador y diputado. En 1883 desaparecen todas esas condiciones económicas.
¿Desaparecieron realmente?
En todo caso ya parece vislumbrarse los culpables de los problemas de definición territorial en nuestro Ecuador y tengan en cuenta desde que fechas.
Una cosa importante que se debe conocer es sobre los acuerdos y/o contratos que se hicieron para tratar de solucionar la creciente deuda externa que ya teníamos. Se acuerdan de los 22´230631,64 pesos que nos enchufaron en 1816? Pues bien sin entrar en detalles el Gobierno del Presidente Robles allá por el año de 1857 autoriza la firma del contrato Icaza–Pritchet en ese contrato se consecionan a los ingleses tierras ecuatorianas a cambio de bonos de dicha deuda. Dicho de paso comenzamos con 22´230631,64 pesos pero por intereses de más de 41 años, es lógico que había aumentado.
Con toda la tierra que se entregaba en concesión solo se llegaba a cubrir 2´600 600 pesos de esta forma:
100 000
Cuadras cuadradas en el delta del Pailón de Esmeraldas, a 3 pesos cada una
300 000 pesos
1´000 000
De cuadras cuadradas en el Río Zamora a 4 reales de peso, cada una
400 000 pesos
100 000
Cuadras cuadradas en los ríos Sulima, Atacames, Súa a 3 pesos cada una
300 000 pesos
1´000 000
De cuadras cuadradas en Canelos a 4 reales de peso, cada una
400 000 pesos
400200
Cuadras cuadradas en el río Cañar y Púcara hasta cerca del Guayas, a 3 pesos cada una
1´200 600 pesos
TOTAL
2´600 600 pesos
A estas tierras se las consideraban baldías; ni siquiera a las tierras de Canelos o Zamora podríamos darles ese distintivo pues es muy conocido que en ellas habitaban naturales en perfecta comunión con la naturaleza.
Ni hablar de las Tierras del Guayas, Los Ríos y de Esmeraldas, especialmente en está última donde los esmeraldeños tuvieran que sentirse extranjeros en sus propias tierras, donde por obra y gracia de los tenedores de las mismas eran expulsados, maltratados, vejados; inclusive la Compañía “Ecuador Land” tuvo el atrevimiento de hacer circular otra moneda en sus dominios. Afortunadamente en el Gobierno del señor Ing. Federico Páez en 1937 estas tierras fueron “devueltas” al Estado. Esta infamia duró por el lapso de aproximadamente 80 años. – increíble -
Bueno, el Ecuador siguió su marcha peleas, broncas, rencillas gobiernos van, gobiernos vienen, Eloy Alfaro había escogido a Esmeraldas como su puerto de entrada y salida del país y ese contacto hizo que germinara la simiente revolucionaria en estas tierras, además de la identificación de los esmeraldeños con Juan Montalvo eligiéndolo por dos ocasiones como su representante en la cámara de diputados. (1877 y 1884).
· Llegó el primer gobierno de Eloy Alfaro, en calidad de Dictador hasta 1896 y como presidente constitucional en el periodo de 1897 – 1901.
· Le continúo Leonidas Plaza 1901-1095.
· Posteriormente por la proclama dictatorial[13] de Eloy Alfaro apoyada por el Gral. Emilio María Terán Jefe de la Guarnición Militar en Riobamba que mediante oficio dejaron cesante, en diciembre 31 del 1096, al Presidente de esa época, Lizardo García, (comerciante Guayaquileño) que solo pudo saborear el poder 4 meses.
· Después en 1911 Emilio Estrada el cual dura también 4 meses en funciones pues viajando a Guayaquil le sorprende un paro cardíaco muriendo el 21 de diciembre de 1911.
· En 1912 se presentó una guerra civil con epílogo de la muerte y arrastre por las calles de Quito del Gral. Eloy Alfaro el 28 de enero de 1912.
Imaginémonos la situación social y económica del pueblo por esos tiempos
· Segunda Presidencia del Gral. Plaza en donde Esmeraldas es protagonista de la revolución dirigida por el Coronel Carlos Concha Torres con la cooperación resuelta y pertinaz de negros y mestizos esmeraldeños y pueblos costeños de Colombia. En emboscadas y sorpresas, batallones enteros sucumbían masacrados cerca del mar o en las montañas. Esta revolución no acabó hasta el régimen subsiguiente del Presidente Alfredo Baquerizo Moreno, mediante decreto de amnistía General.
· PRIMERA GUERRA MUNDIAL (agosto de 1914).- Etapa de nefastas consecuencias económicas para todo el Ecuador, pues fue absorbida toda la vitalidad económica y el poder político nacional por la plutocracia y los bancos especialmente de Guayaquil. Recordemos al BANCO COMERCIAL Y AGRÍCOLA el cual llegó a tener un poder tal que mediante la prensa deudora, y empleados inteligentemente colocados en el aparato estatal se hacía correr la bola de “no hay circulante” y como se necesitaba dinero, pues simplemente se lo fabricaba sin el debido respaldo, lo que conllevó a la depreciación monetaria.
· En 1920 termina el gobierno de Alfredo Baquerizo Moreno y naturalmente se designa sucesor del abogado de… ¿quién creen?... ¡Del BANCO COMERCIAL Y AGRÍCOLA!
· En 1918 el Capital Simón Plata Torres con su propio patrimonio abre el camino Esmeraldas – Viche ¿creen ustedes que si hubiera sido decisión del gobierno Central se lo hubiera hecho?.
· Ante gestiones realizadas por Simón Plata Torres con convicción ante el gobierno central en esa época -1925-, se logra un contrato por diez mil sucres[14] para la apertura del camino Quinindé – Santo Domingo de Los Colorados.
Es posible que hayan accedido al mismo pues a principios de 1925, en el mes de marzo concretamente el río Chanchán se llevó 10 Km. de vía férrea que unían Guayaquil y Quito quedándose literalmente aislados. Y, para reparar esos 10 Km. los gringos les pidieron 2 millones de sucres con un plazo de un año; pero era tal la desesperación para repararle que en sólo mes y medio los quiteños y guayaquileños lo hicieron por 300 000 sucres.
Comparen con los 10 000 sucres del contrato que le dieron a Simón Plata Torres, para una obra de la cual los mayores beneficiados eran los quiteños justamente.
En todo caso la “pica” (camino Quinindé – Sto. Dgo de los Colorados) fue realizada en un tiempo de más o menos 8 semanas tumbando esta selva a mano y para hacer que el tránsito por la misma fuera lo menos riesgoso, a lo largo de ella se fueron dejando tamberos para que además de darle mantenimiento, dieran hospedaje a los viajeros.
¡¡LAS CONDICIONES ESTABAN DADAS PARA LA COLONIZACIÓN DE ESTAS TIERRAS!!
Pregunto - ¿Algún Quiteño puso alguna vez, un mínimo de empeño, en realizar esta “Pica”? –
Por el contrario siempre hubo reparos por este proyecto, pero cuando ya se abrió la “pica” y más aún cuando ya estuvo lastrada, y por las condiciones SOCIALES, ECONÓMICAS Y POLÍTICAS en las que se encontraba el Ecuador que más adelante se explican, la Colonización fue imparable a estos sectores de la patria, que siempre estuvo dispuesto a recibirlos.
A continuación, es menester hacerlo, transcribo el Decreto mediante el cual se da el nombre de SIMÓN PLATA TORRES a la carretera QUITO – QUININDE – ESMERALDAS.
REGISTRO OFICIAL Nº 129 DE 18 DE MAYO DE 1967
LA ASAMBLEA NACIONAL CONSTITUYENTE
“CONSIDERANDO”
Que ha dejado de existir en la ciudad de Esmeraldas, el día 16 de mayo de 1967, el señor Capitán SIMÓN PLATA TORRES.
Que el extinto ha ocupado los más altos cargos de la Provincia de Esmeraldas y ha sido legislador por varias ocasiones;
Que fue un apasionado luchador por el planteamiento y ejecución de la carretera Quito – Quinindé – Esmeraldas; así como por obras de carácter social en general;
Que es deber de esta Honorable Asamblea solidarizarse con el dolor que aflige a sus deudos,
ACUERDA
Dejar expresa constancia de su pesar por tan irreparable pérdida;
Manifestar a su distinguida esposa e hijos y demás miembros de su familia, la sentida condolencia de esta Asamblea;
Dar el nombre de SIMÓN PLATA TORRES a la carretera que se indica en el tercer considerando;
Asignar por una sola vez, la suma de S/. 20 000,00 a la viuda del extinto, cuya situación económica es precaria; pago que se hará del fondo rotativo de la Asamblea;
Enviar copia del auténtico a los familiares; y
Publicarlo por la Prensa.
Dado en Quito, en la Sala de Sesiones de la H. Asamblea Constituyente, a los diecisiete días del mes de Mayo de mil novecientos sesenta y siete.
f) Julio Estupiñán Tello, Segundo Presidente Encargado de la Presidencia. f) Eduardo Chiriboga Cajía, Secretario de la H. Asamblea Nacional Constituyente.
· En 1926 después de dos fallidas Juntas de Gobiernos Plurales; en el Gobierno “Provisional” del Dr. Isidro Ayora se da mayor impulso a la construcción del Ferrocarril Quito – Esmeraldas, pero que alcanza llegar sólo a Ibarra.
· La “pica” que realizó Plata Torres siguió como tal hasta mediados de la época de los años cuarenta. Pues hasta 1945 solo era carretera hasta el Km. 16 desde Sto. Dgo. de los Colorados.
En la presidencia del Dr. Arroyo del Río durante el período de 1940 – 1945 coincide con la segunda guerra mundial y entiendo que por seguridad continental puso a servicio de nuestros “queridos gringuitos” las Islas del Archipiélago de Galápagos y territorios de la Península de Santa Elena, ¡¡como siempre buena geeente los ecuatorianos!!.
Ecuador vio, sorpresivamente, reducidas sus exportaciones, pues, justamente sus principales consumidores, estaban en guerra. Pero como no hay mal que por bien no venga, nuestro caucho y nuestra madera de balsa, artículos indispensables para la guerra, se vendían totalmente y a un buen precio a los Estados Unidos de Norteamérica. ¿Donde se encontraban en abundancia caucho y balsa silvestres? ¿Adivinaron? …pues por aquí, por nuestras selvas[15] y había en tal abundancia que la compañía RUBBER CORPORATION puso dos tambos para la compra de estos materiales, uno en el Km. 35 y otro en lo que hoy es La Unión.
Esta bonanza dada, aunque transitoria, por la venta del caucho y de la balsa cubrió el vacío de la exportación, de tal forma que llegó a crear un superávit en el fisco ecuatoriano. Pudiendo el gobierno de Arroyo del Río atender, en plena crisis mundial, servicios extraordinarios en beneficio del país. Como por ejemplo: ayudas a municipios necesitados, adquisición o construcción de edificios para el ministerio del tesoro, ministerio de economía, museo nacional de bellas artes, construcciones escolares, creación de colegios con rentas fijas como el nacional Juan Pío Montúfar de Quito, nacional de señoritas de Riobamba, nacional de Atuntaqui, nacional de Zaruma, Universidad Nacional de Loja, Instituto Cultural Ecuatoriano (Casa de la Cultura), etc., etc.
LA CONCORDIA
En 1883, 13 años después de que la “pica” ya estuvo abierta, se asentaron en el Km 43 los primeros colonos, de la futura La Concordia, Uberto Quiñónez, su esposa y su hermano Astalfo.
Don Uberto se estableció, justamente donde hoy se encuentra el edificio de la Empresa Eléctrica. Él y su hermano se dedicaban a las labores agrícolas y cuando lo necesitaban se adentraban a la montaña a cauchar y/o cazar.
Don Roberto Estacio Andino, mulato de Río Verde, el cual ya había recorrido estos caminos con la comisión de contratados por Don Simón Plata Torres en los años 37 – 38, llega a estas tierras a la casa de Don Uberto (según memorias escritas por Don Roberto Estacio) el 24 de Diciembre de 1944, después de una tenaz caminata desde Santo Domingo de Colorados.
· En 1944 Arroyo del Río es derrocado por descontento popular, pues no olviden que en su gobierno se firmó el tratado de Río de Janeiro.
· Llega la segunda presidencia de Velasco Ibarra que termina abruptamente en 1947.
En tan corto período de tiempo la República se encuentra encerrada en una grave depresión económica. Se derrochan escandalosamente los fondos públicos, se desvaloriza aún más el sucre, comienza una galopante inflación que causaba el desencanto, desesperación y ruina de las masas populares.
· De 1947 a 1948 gobernó el país Carlos Julio Arosemena, lo hizo por lo menos en paz, era un interinazgo.
“19 de noviembre de 1947”:
Esmeraldas intenta crear la parroquia Río Blanco, esta parroquia comprendía territorios de los recintos Río Blanco, Cócola, Diana, Selva Alegre, Inca y La Unión; algunos colonos quiteños, que se encontraban en La Unión, ¡creyendo que eso es de pichincha!, reclamaron .
“¿NO ES AHORA LA UNIÓN PARROQUIA ESMERALDEÑA”
EN LA CREACIÓN DE ESTA PARROQUIA NACE PROPIAMENTE LA DISCUSIÓN DE LÍMITES ENTRE ESMERALDAS Y PICHINCHA
OJO, LA CONCORDIA COMO TAL NO EXISTÍA
· Para el periodo de 1948 – 1952 se eligió a Don Galo Plaza Lasso, el cual tuvo que soportar el pavoroso terremoto del 49 en plena crisis, y
· Llega el tercer velasquismo para gobernar, estaba vez durante todo el período desde 1952 a 1956. Coincidentemente el país entra en el BOOM bananero.
Por esas épocas –años más, años menos- buscando mejores vientos para un superior desarrollo personal y de sus familias comenzaron a llegar en abundancia colonos (carchenses, Pichinchanos, manabas, esmeraldeños hasta gringos), algunos a radicarse con toda su familia, otros a crear familia y los más aniñaditos solo a acumular tierras (algunos las conocían, otros ni eso siquiera) las cuales dejaban con administradores y vivían tranquilamente en la ciudad.
Ya estaban en el sector Don Uberto, su familia y Don Roberto cuando llegaron además Doña Rosa Bolaños moradora de unos de los barrios del sur del Quito; mi abuelo Salomón Tufiño, con toda su familia (aprox. Mayo de 1952), Luís Muñoz, José Alarcón, José Luzuriga, Séfora Santander (madre del Extinto Don Agustín Ocampo), José Saona, Alejandro Yandúm, James Brown, Roscoe Scott Sam Whitney, Albert Rudehardt, Jack Sheppard, Pastor Toscano, Ignacio Ruiz, Dr. Almeida (se me escapa el nombre), Laureano Zambrano, José Vega, Gumersindo Reyes, Juan Pusdá, Arturo Castro, Arturo y Medardo Tapia, Manuel Vargas, Flavio Guerrero, Fernando Tenorio, Navidad Diez, Gilberto Bautista, entre otros.
Como una nota aparte.- en lo que respecta a mis abuelos Don Salomón Tufiño Suárez y Doña Enriqueta Vallejo Vallejo, desde que se asentaron en el Km. 43, supieron que estaban en territorio esmeraldeño, tanto que recuerdo, allá por el 73 ó 74 cuando eran visitados por los mismos, estos les increpaban en son de broma, de la siguiente forma: ¡Que es pues! ¡hijito, hijita! como han de venir… a estas tierras de Esmeraldas tan lejos de la civilización. ¡Que ha de ser!.
Pero al fin de su estadía se iban contentos y felices cargados con todos lo frutos que podían llevar de la finca de mi abuelo. Así era la vida, bonita y apacible.
En el Km. 43 los días pasaban en paz y armonía, todos amigos entre sí, entregándose por entero a sus propias faenas y asuntos, jamás se hablo o se supo sobre problemas territoriales en estas tierras a pesar del problema del 47, y además, de que el señor Dr. Galo Irigoyen, Síndico del Cantón Quito en 1954, el 15 de febrero del mismo año lanza un furibundo, irascible y desdeñable ataque contra la provincia de Esmeraldas que por pueril e insustancial el cantón que él representaba (Quito) no se atrevió a tomarlas como suyas.
Don Galo, en esos tiempos, todavía creía firmemente en la historia del sacerdote Velasco; se lanza ataques contra del sabio Teodoro Wolf, y otras afirmaciones que por más que las quiso manosear eran de por si descabelladas; como por ejemplo decir que:
“el 20% de las tierras de Esmeraldas son páramos deshabitables y desamparados, que el 30% son eriales[16] desérticos de pedregales y de peñolerías[17] abruptas e inútiles”,
Concluyendo que:
“Tampoco se ha de olvidar que Quito por múltiples circunstancias, está en condiciones económicas y políticas de favorecer más rápido el desarrollo de las dilatadas llanuras que se extienden hasta Quinindé y que esas condiciones tampoco pueden ser igualadas por Esmeraldas. …Finalmente Quito requiere, hasta donde las circunstancias lo permitan, de puertos fluviales para comunicarse al mar”…
-¡noticia bomba!-, siempre se necesitó de esto, siempre se lo pidió, pero nunca lo hicieron, siempre estuvieron ligados al puerto de Guayaquil, tanto es así que tuvo que ser un esmeraldeño, el que construyera el inicial camino, para que Quito se una a Esmeraldas.
Y… sigue Don Galito-… “Quinindé en las actuales condiciones, incluso esta más cerca de Quito que de Esmeraldas, y puede convertirse en un hermoso puerto fluvial DEPENDIENTE DE QUITO, que necesitando de él estaría en aptitud de REALIZAR INVERSIONES Y FINANCIAR OBRAS PORTUARIAS CON ALGUNA FACILIDAD…Si esta necesidad no se comprendiera, se estaría condenando a Quinindé a su estancamiento...
Increíble, la ley del más fuerte, como tengo dinero aplasto al pobre y hago lo que me de la gana – ¡Se pasó Don Galito!-.
Pero eso no es todo, además se atrevió a dar una solución limítrofe que dicta lo siguiente:
“Aguas abajo del Quinindé, desde el punto que confluyen los ríos Dógola y Quinindé, en donde termina realmente el lindero de Manabí con Esmeraldas, según el decreto Supremo del 19 de octubre de 1927, hasta la unión con el río Blanco; por éste, aguas arriba hasta el sitio en que desemboca el río Inca; por éste, aguas arriba hasta el brazo que más se acerca a la desembocadura del río Agua Clara en el Guayllabamba; una pequeña línea ideal a este lugar y aguas arriba hasta el Guayllabamba, hasta la desembocadura del Llurimanga”.
En cristiano: con estos límites la provincia de Pichincha llegaba e incluía a Quinindé en sus territorios – Que tal-
Con esto termino el asunto de Don Galo Irigoyen, pues en su tiempo sus afirmaciones fueron refutadas hasta la saciedad por Don Julio Estupiñán Tello en su obra LIMITES ESMERALDAS – PICHINCHA de 1988.
Decía que, a pesar de esta publicación lanzada en 1954, en donde la carretera era lastrada y llegaba a Quinindé, la gente en la primigenia La Concordia, ni se enteró y si lo supo tampoco hizo caso pues su única meta era la de realizarse y progresar en estas hermosas tierras.
NO OLVIDEMOS QUE:
TODOS ELLOS ERAN EXTRAÑOS EN ESTOS LUGARES,
TODOS ERAN AFUEREÑOS, ESTAS TIERRAS LES ABRIÓ SUS BRAZOS PARA QUE SE ASIENTEN Y PROGRESEN
Ya existía un sinnúmero de colonos en el sector del Km. 43, y a la vez gran número de niños y “casi” jóvenes de edad escolar que se la estaban pasado de agache y disfrutando de estos hermosos pero abandonados parajes, así que nació la idea de organizarse para la creación de una “escuela”.
Según hasta donde he podido averiguar, nadie sabe cuando fue la primera reunión ni cuando se nombraron las palabras “LA CONCORDIA” (existen varias versiones de ello), pero de acuerdo a documentos que fueron preservados por el Prof. Luís Trujillo, existe una Acta del CENTRO CULTURAL “LA CONCORDIA” CON SESIÓN DEL 3 DE SEPTIEMBRE DE 1955, que a decir verdad de la fotocopia que tengo en mi poder es casi ilegible para mi, por eso recurro al ensayo histórico “Colonización y Fundación de La Concordia 1940-1955” realizado por mi tío el Prof. Javier Tufiño Vallejo el cual transcribe acertadamente, de esta manera.
“El Centro Cultural La Concordia, se reúnen en sesión plena acordó el día 3 de septiembre de 1955.
Acordó una cuota voluntaria de cinco sucres por cada socio hasta cubrir los S/. 300.oo por cuenta del Sr. Profesor que tendría que cobrar donde la Sra. Tesorera y también acordó presentarse todo el comité con todos sus miembros ante el señor Ministro en caso de ser necesario.
Siguen tres firmas una ilegible (supongo Luís Muñoz) la otra se lee Roberto Estacio (no dice cargo) y la tercera se lee Salomón Tufiño, cargo se lee SECRETARIO. Y sigue el Acta
Los señores comisionados que se acordó a Quito son las siguientes personas: Sr. Luís Muñoz, Sr. Roberto Estacio, José Saona, Gumersindo Reyes, Pastor Toscano, Rodolfo Burgos y Salomón Tufiño.
De esta Acta se deduce fácilmente dos cosas fundamentales:
La primera que ya se había nombrado como La Concordia al centro cultural del cual los socios formaban parte. En todo caso se presume, que en una fecha anterior al 3 de septiembre de 1955 ya se dio la elección del nombre La Concordia.
Alguien puede decir: Bueno esta bien, pero ¿se nombró al Centro o al Recinto? –Usted escoja- lo importante es que SE TOMÓ ESE NOMBRE PORQUE ENTRE LOS PRIMEROS COLONOS, VERDADERAMENTE, EXISTÍA UNA GRAN UNIDAD, AMISTAD Y CARIÑO.
Personalmente creó que, una vez formado el pueblo, este simplemente heredó el nombre del Centro Cultural.
La segunda era que iban a viajar a Quito para hablar con un Ministro se colige que era al Ministro de Educación por los tres cientos sucres por cuenta del señor profesor.
Pues bien, según memorias escritas del señor Roberto Estacio, por esa fecha la escuela ya estaba en construcción, y cuando llegaron a Quito ( tercer gobierno del Dr. Velasco Ibarra) el Ministro no estaba en su despacho y fueron atendidos por el subsecretario, el cual les explico que no habían partidas presupuestaria para esa zona, que iba a ver que se hace pero que regresen en unos 8 días – normal en un país donde la educación siempre ha sido relegada y más aún en una “naciente Banana Republic”-
De regreso a los ocho días, el subsecretario les dio buenas, noticias indicándoles que se había tratado el tema y ya estaba en trámite la solicitud y que dejen a una persona que viva en Quito para que se encargue de hacer el seguimiento respectivo. Según Don Roberto Estacio pues no hay nada ni nadie que diga lo contrario, en la segunda comisión también estaba Doña Rosa Bolaños, la que gentilmente ofreció a su esposo Don Sergio Núñez para que se haga cargo del trámite pues el vivía y trabajaba en Quito – es cierto porque el mencionado señor muy poco llegó a La Concordia y cuando lo hizo no intimó con casi nadie (según fuentes de actuales moradores de La Concordia)--.
Sea como fuere, por versiones del mismo Don Roberto, estando con el subsecretario, llegó una comisión de moradores del Km. 48 (La Independencia), presidida por el señor Alejandro Yandúm Cadena, solicitando lo mismo, lo que generó ciertos inconvenientes y problemas personales, entre algunos pobladores.
De aquí en adelante es cuando las cosas y hasta las fechas no cuadran pues como el Subsecretario (según Don Roberto testigo presencial del asunto)dijo que el trámite de la partida para el profesor, ya estaba en marcha, se supone que solo era cuestión de tiempo para que esto se dé; pero por versiones de antiguos moradores y ex estudiantes primarios de esa escuela, cuentan que al principio se les ordenó a los moradores del Km. 43, que realicen un censo para saber cuantos niños habían en la zona, porque ya existía una escuela, la “VELASCO IBARRA”, en el sector del Km. 50 (El Consuelo).
Y para complicar las cosas el Prof. Trujillo en su Monografía narra que él personalmente en compañía del Supervisor del lugar Prof. Luís Reinoso (cosa curiosa casi todos los profesores y personajes de esa época se llamaban Luís) realizaron ese censo.
Raro, pues en caso de ser cierto se supone que tuvo que tener algún tiempo para realizar y tener en orden lo pedido, de cualquier forma la afirmación de Trujillo no encaja pues el alega que su nombramiento como profesor, de la escuela, se lo entregaron el 4 de septiembre de 1955, cosa imposible pues la reunión, que realizaron los colonos, para viajar a Quito, se la acordó un 3 de septiembre de 1955 un día ANTES que, supuestamente Trujillo afirma, le habían entregado el nombramiento y en este caso al existir el Acta de reunión de los moradores, el fulero resulta Trujillo.
Sea como fuere el asunto es que se consiguió el profesor. Exactamente el señor Trujillo, comenzando clases en la escuela sin nombre del km. 43[18] de la vía Sto. Dgo. – Quinindé, en un día cualquiera, supongo, del mes de noviembre.
El señor profesor, joven él, trabajaba sí,… pero según versiones de sus estudiantes era “una pava” par declarar los viernes días festivos y coorre al río cucaracha, coorre a la cacería, cooorre para el voley es decir Don Trujillo era todo un aventurero, cazador y deportista…...en todo caso el sector y lo hermoso del mismo daba a que el profesor, citadino él, haya estado admirado y contento en este lugar.
Como todo lo bueno llega a su fin. Le vino el cambio a Don Luís Trujillo, ese año lectivo duró 3 meses y mandaron a otro Luís pero de apellido Vallejo.
Antes de referirme al Prof. Vallejo, quiero hacerlo a un punto que ha guardado diferentes interpretaciones y es respecto a los terrenos de la CURIA, pues según memorias de Don Roberto, cuando él era ya un próspero agricultor vio con buenos ojos unos terrenos que estaban a lado de sus tierras que durante el tiempo que el estuvo allí nadie vino ni siquiera a verlos, preguntó a sus vecinos, Uberto y Astolfo Quiñónez, si conocían al dueño; ellos tampoco lo conocían, entonces Don Roberto se dio a la tarea de cultivarlos plantando banano y hacer lógicamente posesión de los mismos (El parque actual y cuadra aledañas para atrás llegando hasta tener 30 hectáreas cultivadas). Pues cuando estos terrenos en principio de 15 hectáreas estaban en plena producción, llegó un señor con un título de propiedad, que le había entregado el Departamento de tierras baldías en Quito[19], certificando que esas tierras le pertenecían. El mencionado señor era el Contra Almirante Moncayo Merizalde. Esto originó un juicio el cual sentenciaba que se debían devolver las tierras, pero el señor Moncayo debía cancelar el precio del trabajo y el valor de los sembríos, a lo que el se negaba y Don Roberto sembraba más y el precio aumentaba para perjuicio del Contra Almirante el cual ya cansado de los trámites dejo el problema, pero donó el título de propiedad a la CURIA METROPOLITANA DE QUITO.
No voy a referirme a la repartición de los terrenos y como fue tomando forma el pueblo ni quienes ni donde se ubicaron, porque de eso ya harto se ha hablado en otros trabajos.
Volviendo donde Don Luís Vallejo el cual encontrándose en sus labores diarias -como no existe fecha exacta de lo que voy a relatar y nadie lo dice, asumo algún día de 1958-1959 año lectivo para el que fue nombrado el Prof. Vallejo-, llegó una comisión de políticos esmeraldeños conformada así: Don Jorge Chiriboga Guerrero, Alcalde de Esmeraldas, Don Luís López Estupiñán, Don Atahualpa Perdomo (Supervisor de Educación), entre otros (según Don Roberto Estacio)los cuales iban en comisión hacia la provincia del Guayas y al pasar, por casualidad, vieron la escuela y más aún funcionando, lo que les causó extrañeza pues al ser estos sus territorios, obviamente, tenían que hacer presencia -ellos como políticos estaban al tanto de los problemas limítrofes que ya se suscitaban-.
Sucediendo en ese instante lo que a mi parecer, Don Jorge comete un error político y diplomático garrafal –el carácter del Sr. Chiriboga era así de espontáneo- pues le dice al profesor en más o menos estas palabras: Como esto es tierra esmeraldeña de ahora en adelante nosotros te vamos a pagar el sueldo –lo que para el profesor, que más me quiero, ¡doble sueldo!- .
Lo correcto hubiera sido que Don Jorge Chiriboga se dirija a Quito y realice el traspaso de partida y no pasaba nada.
Por otro lado Don Jorge Chiriboga se puso a las órdenes del pueblo, indicándoles que le pidan lo que necesiten, pues esto es territorio esmeraldeño.
Es de conocimiento público en la provincia, que siempre, en cualquier función en la que se encontró Don Jorge Chiriboga Guerrero no hubo más prioridad que de la de ayudar a este pueblo, eso no se lo puede negar pues sería querer tapar el sol con un solo dedo; sería imposible tratar de enumerar la obras que este esmeraldeño hizo por La Concordia.
A pesar de las diferencias políticas, de su forma de actuar, a pesar de sus errores, nadie podría negar el gran esfuerzo que él hizo por este pueblo.
Regresando al acto, lo del doble sueldo, hizo nacer el disgusto de algunos padres de familia, entre ellos Doña Rosa Bolaños -que no era madre de familia de la escuela-, Luís Muñoz y otros; realizan una denuncia a Quito que finaliza con la separación, del señor Vallejo, de su cargo.
Como en ese tiempo los trámites se demoraban un “poquito” más que ahora. Don Jorge Chiriboga trae material de primera mano para construir y/o reconstruir la escuela erigida por los colonos pero viene con el nombramiento de la primera profesora, la señorita Miriam Heras la cual se hace cargo de la escuela “sin nombre” que después se llamaría “Luís Vargas Torres” este acto enfureció aún más a los padres de familia que habían denunciado al profesor Vallejo y en vez de calmar las cosas, las empeoraron, pues caprichosamente y antojadizamente viajaron a Quito, tramitaron la creación de la escuela Sergio Núñez y la edificaron al frente de la otra (en el lugar actual) y.. Según ellos que se joda el “negro Chiriboga”.
Así fue exactamente como comenzó en La Concordia la división interna de sus colonos. División interna, pero no de límites, pues estos, para Pichincha, existía, desde hace mucho. (Especialmente desde el 19 de noviembre de 1947)
…Todo el tiempo se clamó por un camino que uniera Quito a Esmeraldas. Pocos hicieron caso y los intentos siempre se truncaron. La unión política y comercial que mantenían Pichincha y Guayas no lo permitió. Solo bastó el coraje de un esmeraldeño como Simón Plata Torres para lograr el objetivo clamado desde la colonia.
Los cambios sociales, políticos y económicos del país que fueron narrados, hicieron que una vez abierta la “pica”, fueran llegando a “gotas” los primeros colonos y una vez lastrada, esas gotas se transformaran en torrentes que poblaron este rico y hermoso territorio del Ecuador. Estas tierras nunca fueron desconocidas, sus naturales, sus negros y sus mestizos siempre las conocieron, Esmeraldas nunca las reclamó, únicamente las ha defendido y fue la gestora del progreso inicial.
En el Km. 43, solo por el antojo de unos cuantos que, en su mayoría, ya están en mejor vida se generó un problema extraño a los concordenses, que al comienzo parecía pequeño, pero que nadie imaginaba en ese entonces, que al tener dos escuelas con diferentes formas de enseñar el amor a su lugar natal, fueran las causantes primigenias, que después al sumarse intereses políticos que unidos al aberrante regionalismo y el monstruoso racismo hayan hecho que estemos donde estamos.
CONCORDENSES SOMOS MERECEDORES DE UN MEJOR FUTURO, NO DEJEMOS QUE LA IGNORANCIA Y LOS INTERESES PERSONALES DE ALGUNOS, NOS HAGAN ACTUAR DE FORMA IRRACIONAL.
“AL CESAR LO QUE ES DEL CESAR Y A DIOS LO QUE ES DE DIOS”
“EL QUE TENGA OJOS QUE VEA Y EL QUE TENGA OÍDOS QUE OIGAN”
¡PIÉNSELO!, ¡MEDÍTELO!, ¡RAZÓNELO! Y SAQUE SUS CONCLUSIONES
¡VIVA LA CONCORDIA!
[1] “¡Ojo!, no estoy en contra de la carretera; la carretera es una gran obra nacional que beneficia a todo el país (especialmente Quito), pero también es cierto que las carreteras así como dan progreso también relegan al mismo. (Tenemos que buscar solución a esto… y… Sí la hay)”
[2] En algunos casos, sí
[3] en nuestro sector casi todos los ríos eran navegables por pequeñas embarcaciones, aún hoy
[4] Enrique Ayala Mora
[5] denominación que deriva de “BIRÚ” nombre nativo de un río en la costa del pacífico al norte de la actual Colombia
[6] el cual asombró de sobremanera a los españoles pues esta era una población de casi tres mil habitantes con casas en perfecto orden arquitectónico y con calles y plazas
[7] especialmente en el reparto pagado por Atahualpa y los honores de la corona
[8] La Gran Colombia dura casi exactamente 8 años (29 de mayo de 1822 hasta el 13 de mayo de 1830)
[9] Un Dato interesante.- En su gobierno teniendo como General en Jefe del ejercito a nada menos que Juan José Flores, su auspiciante a la presidencia, se acepto una deuda contraída desde 1816 por un valor de 22´230631,64 pesos, tiempo en que el Ecuador, no se llamaba ni Ecuador ni jamás pensó ser distrito de la Gran Colombia. Esta deuda es el origen de nuestra deuda externa
[10]Todos los decretos son transcritos del libro RECOPILACIÓN DE LEYES, DECRETOS Y ORDENANZAS SOBRE DIVISIÓN POLÍTICA DE ESMERALDAS, Julio Estupiñán Tello.- 1977
[11] L.T: Ley Territorial
[12] como lo dijo un folklórico político de las épocas actuales en más o menos estos términos: “La sierra es la tierra donde se siembra y produce la papa y el melloco, cuando nos acercamos a tierras donde se cultiva el guineo, el plátano y la yuca (con señal incluida) ¡ya sabemos que estamos en la costa!”
[13] después es elegido presidente constitucional para 1907-1908
[14] Según el folleto “La Concordia, emblema territorial de la Provincia de Esmeraldas” de Lic. Luís López Estupiñán. Pág. 38 y Libro Historia de Quinindé de Jalisco Gonzáles Tenorio. Pág. 19 II párrafo.
[15] En otras partes del país también había y hay balsa y caucho, solo que el ensayo se refiere a La Concordia
[16] Tierra o campo sin cultivar y labrar .- Esto es cierto pues eran selvas de infinita riqueza, pero que diga ¡¡DESÉRTICOS!!. - ESE SEÑOR NUNCA CONOCIÓ ESTAS TIERRAS
[17] Según el libro de Don Galito esto lo tomo de LUCIANO ANDRADE MARÍN – peñolerías es una palabra que no existe
[18]
[19] en esa época cualquiera iba al mencionado departamento, cogía un plano y decía quiero estos terrenos, ¿cuanto valen?, pagaba y le daban un Título de propiedad
JAVIER OCAMPO
Hace 10 años.
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